VIAJE A LA INDIA

Lo prometido es deuda y espero poder contaros muchas cosas. De momento os puedo decir que me paso absolutamente todo el día estudiando Ayurveda y estoy totalmente absorbida en este mundo.
El viaje fue muy bien. Bueno solamente un par de anecdotas.
Hice escala en Doha, es un aeropuerto muy pequeño de Arabia Saudí y curiosamente esta todo vallado y arriba de la valla hay una alambrada con espinas.
Bien, esto la verdad impresiona un poco.
Estabamos dentro del bus que te lleva al avión para Mumbai, yo era la única turista, y todo el mundo estaba hablando alegremente.
Hacia un calor absolutamente increíble, 36º y muchísima humedad. Dentro del bus no había aire condicionado.
Por lo tanto ni os cuento como estabamos allí dentro, encima de cansados.
Bien, llegamos al pie del avión y el conductor se baja del bus y nos deja a todos dentro del bus sin abrir las puertas.
Primero la gente iba hablando y no se dan cuenta de que estabamos encerrados. De repente hay un señor que empieza a dar golpes en la ventana. Acto seguido la gente empieza a hacer lo mismo.
Yo miraba hacia fuera del bus, veía la valla, el alambre de púas y pensaba porque he tenido que ir en el único bus donde hay un motín???.
Por suerte al rato vino un señor y nos abrió pero sin dejarnos bajar del bus. Ni os cuento como estaba la gente de enfadada.
Yo solo pensaba en subir al avión, donde por cierto hacía un frío de muerte, e irme hacia India.
La otra anecdota es que cuando llegamos a Mumbai, un poco congelados, tienes que entregar una hoja con tus datos, donde te alojas, etc.
Cuatro de la madrugada, ganas de salir de allí lo más rápidamente posible ya que aún me esparaba un viaje en coche de cuatro horas. Mi mente estaba en blanco y donde te preguntan donde te alojas, no me acordaba. Sabía que era en Pune evidentemente pero no tenía ni idea de la dirección y no lo tenía apuntado en ningún sitio.
Voy al primer control y el señor me dice que necesita saber donde estaré de Pune, Mi mente en blanco. Voy a otro señor, por si era más amable y me dice lo mismo. Mi mente empieza a funcionar y me invento un nombre de hotel. Puse el único nombre que me vino a la cabeza, Hotel Metropolitan y la verdad es que no conozco ningún hotel con ese nombre, pero pensé que quedaba bien y dudaba mucho que aquellos señores conocieran todos los hoteles de Pune.
Voy a otro señor diferente y enseño mi pasaporte y doy la hoja. Interiormente empiezo a rezar a todos los dioses de la India que no son pocos y al final me mira muy serio y me dice que puedo pasar.
En aquel momento me cogieron ganar de besarlo, pero no lo hice ya que hubiera resultado muy sospechoso.

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